Guadalajara Country Club

El Guadalajara Country Club nació un 18 de septiembre de 1909.

En sus inicios fue un club social donde se reunían los miembros más prominentes de la sociedad, así como gente del cuerpo diplomático acreditado en la ciudad de Guadalajara y de los ciudadanos extranjeros de las diferentes colonias que solían radicar en Jalisco, como eran la francesa, la inglesa, la alemana y la norteamericana.

Como característica adicional, el club poco a poco fue dando impulso al deporte, entre ellos el tenis, béisbol, polo, boliche, básquetbol, gimnasia, frontón asesta y el frontenis.

En un principio, el campo de golf estaba en lo que hoy es la entrada del fraccionamiento Jardines del Bosque, y en la zona de los arcos de la avenida Vallarta. Era un terreno muy primitivo, sin pasto. Sus tees de salida eran unos pequeños levantamientos de piso de cemento y, al lado de éstos, había dos cajitas: una de agua y otro de arena. El caddy tomaba la tierra y formaba un pequeño montoncito de lodo y lo ponía sobre la plataforma para que sirviera de tee.

Por otro parte, los fairways y los greenes eran de arena. De tal manera que al pisarla, ésta se volvía muy irregular y, entonces, había un especie de regla te con la que se aplanaba la zona donde el jugador iba a tirar en ese instante.

Los obstáculos del campo no eran más que simples aludes hechos artificialmente de adobe y recubiertos de pasto para brincar la bola e, incluso, no había árboles.

Por otro lado, en los años treinta, un grupo capitaneado por Raúl Urrea, a quien acompañaban Javier Verea, Enrique Aldrete, el doctor Ignacio Chávez, el doctor Jorge Romo, Luis Hoff y un grupo de amigos que jugaron golf en los Estados Unidos, se unieron y quisieron hacer un campo de golf, pero no tenían el dinero ni las tierras suficientes. Entonces, el general Andrés Figueroa, quien era el jefe de XV Zona Militar, les ofreció los terrenos del antiguo campo aéreo, que estaban cerca de lo que ahora es La Nogalera. Ahí jugaban con greenes de semilla de algodón, pero de una manera totalmente rústica, sin fairways ni pasto cultivado.

Después, los golfistas consiguieron que los hermanos Alfonso y Nacho Castellanos, propietarios de El Deán, les prestaran o les rentaran su antiguo rancho, que fue convertido en un campo de golf más o menos formal con seis hoyos y así permaneció hasta 1942, cuando ya se inauguró el actual Country Club.

Los primeros años del golf en Guadalajara no pasaron de ser una rareza, como también lo fue el básquetbol. Sin embargo, poco a poco este deporte fue ganando aficionados y desde 1912 se tiene el registro del primer torneo de golf considerado como el punto de partida en la ciudad.

Por cierto, fue el señor Slattery quien donó la copa para este torneo inicial de golf del Club. Una copa extraordinaria, rara y de un alto valor artístico, pues cuenta con asas y se le conocía como el trofeo de las uvas. Sin duda alguna, es obra de la orfebrería francesa.

El primer torneo fue ganado por José Prieto Menocal. En 1918, Honorato Etienne fue el triunfador y en 1926, el ganador fue Ignacio F. Sahagún.